▷ Salmo 131

Salmo 131 Señor, mi corazón no es ambicioso 1. Señor, mi corazón no es engreído, ni mis ojos altaneros; no persigo grandezas ni prodigios que me superan. 2. Calmo y silencio mi anhelo como un niño junto a su madre, como un niño junto al Señor. 3. ¡Espere Israel en el Señor, ahora y por siempre! Salmos, 131