Salmo 48
La ciudad del gran rey
2.
¡Grande es el Señor y
muy digno de alabanza! En la ciudad de nuestro Dios está su monte
santo:
3.
Bella colina, alegría de toda la tierra, es el monte Sión, confín del norte, la capital del
Emperador.
4.
Dios, desde su palacio, se
muestra como baluarte.
5.
Miren, los reyes se aliaron, atacaron todos juntos:
6.
al verlo, quedaron aterrados, huyeron despavoridos.
7.
Los atenazó un temblor, sí,
espasmos de parturienta:
8. como el viento solano que destroza los navíos de Tarsis.
9.
Lo que oímos, lo hemos visto en la ciudad del Señor Todopoderoso, en la ciudad de
nuestro Dios: el Señor la ha afianzado para siempre.
10.
Meditamos, oh Dios, tu misericordia en medio de tu templo:
11.
como tu fama, oh Dios, tu alabanza llega al confín del mundo. Tu derecha está llena de
justicia:
12.
lo festeja el monte Sión,
los poblados de Judá se alegran de tus sentencias.
13.
Den vueltas en torno a Sión, cuenten sus torreones,
14.
fíjense en sus murallas, observen
sus palacios, para poder contarle a la próxima generación:
15.
¡Éste es Dios!, nuestro
Dios eterno e inmortal que siempre nos guiará.
Salmos, 48
▷ Salmo 48
Reviewed by Manuel
on
octubre 12, 2017
Rating:
No hay comentarios: